El fin de semana pasado Delphine, Maríajo, Sonia y yo habíamos participado en la Carrera de la Mujer. Carrera fácil, en la que todas acabamos con estupendas sensaciones y con ganas de otra carrera y pronto. Dicho y hecho! Esa misma tarde decidimos participar en la Carrera del Agua a celebrar el siguiente fin de semana.Para Delphine y para mi fue muy fácil tomar la decisión. Delphine lleva muy poco tiempo enganchada al running y yo, por motivos laborales, con muy bajo nivel de entrenamiento. Por ello, esta carrera cumplía con nuestro objetivo: mejorar tiempo en un 5.000. Pero, seré sincera, a mi me convenció el recorrido de los 5 kms: una parte llana y lo demás cuesta abajo!!!
La mañana amaneció soleada, la temperatura idónea y los ánimos a tope. Me preparo y desayuno un poco más de lo habitual para que no me fallen las fuerzas.
Efectivamente, el recorrido arranca con un trazado muy suave. Podemos ir adelantando corredores y disfrutando de las calles de Madrid vacías de coches y de sus ruidos. Sólo se oye el golpeteo contra el asfalto de cientos de zapatillas …un verdadero placer!
Casi sin darnos cuenta ya estamos en el kilómetro 2. Vamos muy bien, disfrutando de la calle Bravo Murillo y yo sin apenas hablar para no perder ni una sola de mis fuerzas. Me concentro en poner en práctica todo lo aprendido en las clases del Runners Zagros y Club de Triatlón: la respiración, el braceo, las zancadas.
Intentamos apretar un poco, sin perder ritmo y divisando el globo de 30´.
Llegamos al kilómetro tres y entonces aprendo una gran lección: no debo desayunar más de lo que habitualmente tomo o empezaré a tener una extraña y desagradable sensación en el estómago.
Procuro olvidarme de este repentino malestar y seguir sin pensar en ello. Delphine va fenomenal así que, hay que seguir, no hay malestar que valga. Quedan apenas dos kilómetros y cuesta abajo.
Los dos kilómetros pasan rápidos y… ya está! Carrera terminada. Nuestro objetivo se nos ha escapado por los pelos pero estamos contentas.
Hemos ido a buen ritmo, siendo exigentes con nosotras mismas y sobre todo, disfrutando.
Ya en meta nos encontramos con Javi y esperamos a Fátima, Maríajo y Sonia que participan en la carrera de 10 kms.
Es la primera carrera oficial para Fátima y resulta emocionante participar en su bautizo como runner. Ellas han hecho una carrera fantástica dentro de sus objetivos así que, ha sido una mañana perfecta!
Ahora, a desayunar que es la parte más gratificante de toda carrera: recuperar fuerzas, comentar los pormenores de la misma y fijar nuevos objetivos.
Hasta la próxima!